.

.
Este blog empieza hoy para compartir mi gran pasión por la cocina.

Muchas de las recetas que pongo las tengo de mi madre o de mi abuela, o me las pasan mis amigas.

Otras las he aprendido en mi escuela de hostelería, o las he ido encontrando en mis numerosas visitas a diferentes blogs, y una buena parte, se me han ido ocurriendo sobre la marcha cogiendo lo que pillaba por la despensa y en la nevera.

Este blog nace para recopilar todas estas recetas y compartirlas con mi gente, y con quien quiera pasarse por aquí, mostraros las cosillas que vaya haciendo y por supuesto recibir también los consejos de quien crea que puede aportar algo.

Hala, a cocinar!!!!!

lunes, 28 de febrero de 2011

ARROZ NEGRO CON CALAMARES Y GAMBAS


Llevo días desconectada del blog porque estoy en plenos exámenes y ando agobiadísima con el tiempo.

Entre el montón de trabajos a ordenador que tenemos que entregar y los exámenes teóricos y prácticos, estoy pasando un puente, como diría yo  ...  "inolvidable".

Entre las materias que nos entran este trimestre en las clases de cocina, están los arroces, así que llevo dos semanitas cocinando arroz a diestro y siniestro. Creo que después de esta, nos tiraremos una buena temporadita sin comerlo.

Por cierto, a propósito de la falta de tiempo, me ha sido imposible organizar de momento nada del concurso/sorteo por las 25.000 visitas.
A ver si pasa esta semana y ya pongo la entrada explicándo como lo voy a hacer, vale??

El plato que os presento, es un arroz negro con calamares y gambas.

Nunca lo había hecho antes, porque el día que lo dieron en clases falté, así que, si ya siempre intento hacer en casa todas las recetas que damos, en este caso, con más razón.

La receta es tal cual la dieron en clase.

Por cierto, quiero dedicarle esta entrada a Cristina, del Escorial y a Paz, de Sevilla,  dos chicas muy majas que están suscritas a recibir mis recetas por e-mail.

Cristina,  ya me ha escrito dos o tres correos, y ayer me contaba que había encargado el libro de pastelería que yo recomendé en mi anterior entrada.

Y no sabéis la ilusión que hace algo así, (Bueno, muchos de vosotros, los que tenéis blog si que lo sabéis)

Ver que os interesáis por las cosas que hago, y que si me tiro unos días sin actualizar os dáis cuenta, es muy alentador, la verdad.


En mi caso, empecé este blog con el simple objetivo de tener mis recetas ordenadas, y poco más, ya que con lo desastre que soy,  siempre se me estaban perdiendo.
La sorpresa vino cuando empezásteis a visitarlo y a hacer comentarios, y encima, haceros seguidores y suscribiros a mis recetas por e-mail.
Tengo un montón de suscriptores por e-mail, que en la mayoría de los casos no hacen comentarios, pero que se interesan por mis recetas, como Paz,  que fué la que me sugirió hace unas semanas que pusiera el nombre de la receta en el "asunto" del correo que recibía, para así poder archivarlas mejor.
Yo no tenía ni idea de como se hacía eso, pero conseguí averiguarlo y ponerlo, mejorando así esos correos.
Así que, Paz, muchas gracias por tu sugerencia y espero que así puedas tener tus recetas bien archivadas.

Bueno, pues voy con la receta.

 INGREDIENTES
¼ Kg de calamares limpios
100 grs de gambas
200 gr. de arroz (Yo utilicé el bomba)
2 dientes de ajo
½ cebolla
Tinta de calamar
1 l. de fumet de pescado o marisco
Aceite de oliva
Sal
1 tomate rojo
Perejil
Vino blanco

ELABORACIÓN
En la paellera, sofreír el ajo y la cebolla. Añadir el tomate muy picado, sin piel y sin semillas.

Hacer un majado en el mortero con un diente de ajo, unas hojas de perejil y la tinta de calamar; una vez todo bien machacado añadirle un chorreón de vino blanco.

Añadir los calamares en la paellera y rehogar. Agregar el arroz y marearlo. Mojar con el fumet de pescado, cuando rompa a hervir incorporar el majado y remover con una espátula de madera con cuidado de no romper los granos de arroz.

Colocar las gambas por encima e introducirlo en el horno durante unos 15 minutos, mirando poco a poco por si se queda seco o por si necesita algo más de tiempo.

Cuando ya estaba hecho, saqué del horno y dejé que reposara un poquito antes de emplatarlo para que me quedara algo más seco y poder así emplatarlo con la forma cuadrada.

viernes, 18 de febrero de 2011

BROWNIE "MUERTE LENTA" CON SALSA DE CREMA INGLESA



Detrás de estre nombre, se esconde una receta de Brownie realmente deliciosa.

He realizado varias recetas de este tipo de bizcochos , y sin duda esta es la más rica que he probado jamás (Con permiso de mi querida amiga Christin, que como buena americana, sabe hacer unos Brownies de escándalo).

Parece una frase muy rotunda, pero si os digo que es la receta que hemos hecho en clase, y que viene de nuestro libro de pastelería de la escuela, es más facil de comprender semejante afirmación.

La receta de la crema inglesa también la hemos hecho en clase, sacada de ese libro.

Esta crema es un recurso infalible para adornar un postre: Siempre que queráis algo dulce, y os parece que queda un poquito soso en el plato, que no dice nada, poner en la base del plato, un poquito de crema inglesa y encima el bizcochito en cuestión, o bien un adorno de crema con dos colores al lado del postre, ya veréis lo que luce. Más abajo os explicaré algunas formas de jugar con los colores que quedan muy bien.

En casa, desde luego, ha gustado mucho, y Jose, gran apasionado de cualquier cosa que lleve chocolate, dice que es de los mejores bizcochos que he hecho nunca, toma ya!!!
Desde luego, yo creo que tanto como postre, como para tomar con un café o un té en un rato de relax, es perfecto.

El libro en cuestión se llama "Procesos básicos de Pastelería y repostería. Postres en restauración" de la Editorial Paraninfo. Su autor, Jose Luis Armendáriz Sanz  y es un libro muy interesante, orientado a estudiantes de pastelería y repostería, pero también para cualquier persona que , sin necesidad de conocimientos previos, quiera adentrarse en el mundo de los postres, tal como el mismo autor comenta en la contraportada del libro.
Ahora ya sabeis uno de los secretos más preciados de la pastelería profesional, un  libro verdaderamente recomendable.

Una cosa más, aprovecho para deciros que estoy preparando algo interesante que os ampliaré en breve. Estoy llegando ya a las 25000 visitas en el blog, cantidad inimaginable cuando me animé a abrir mi cocina, y para celebrar esa cifra tan "redonda" y de paso agradeceros que estéis ahí, he pensado en hacer algo especial.
Aún no he decidido si será un concurso de recetas, o un sorteo, así que no os puedo decir nada más.

Y después de esto, doy paso a la receta.

INGREDIENTES:
Para el Brownie:
6 Huevos
200 gr. de Azúcar blanquilla
200 gr. de Azúcar moreno
330 gr. de Mantequilla
130 gr. de Chocolate de cobertura negra
160 gr. de Harina floja  (camos, la harina normal, no la de fuerza que se usa para el pan)
10 gr. de cacao en polvo

Por otra parte: 80 gr. de cobertura negra troceada aprox. (vamos, si la tableta que habéis comprado es de
                                                                                 200 gr., utilizáis los 130 y para trocear dejáis el resto).
                           200 gr. de nueces troceadas (En el libro ponía más, pero a  Mili le parecía una
                                                                    barbaridad y le echamos algo menos, y realmente es más que
                                                                    suficiente para mi gusto).

Para la Salsa de Crema Inglesa:
!/2 l. de leche
75 gr. de azúcar
5 yemas de huevo
Un toque del aroma que queráis. Yo utilicé vainilla pero le podéis poner lo que más os guste, como una
                                                          ramita de canela, o un poquito de ralladura de limón o naranja...

ELABORACIÓN:

Lo primero de todo: Poner el horno a 200º arriba y abajo para que se vaya calentando.

Vamos a hacer en primer lugar el brownie:
Para ello, montamos ligeramente, en la batidora los huevos y los dos tipos de azúcar.
Ablandamos la mantequilla y los 130 gr. de cobertura. En el libro ponía en el microondas, pero en la escuela no tenemos así que lo hicimos al baño maría y así es como yo lo hago en casa, me gusta más porque puedo ir removiendo y que se deshaga de forma homogénea.
Cuando tengamos esto bien fundido y mezclado, lo añadimos al batido de los huevos con el azúcar.
Añadimos la cobertura troceada y las nueces también partidas a trocitos. En ninguno de los casos no deben ser trozos demasiado pequeños, ya que lo que nos interesa es que luego se noten en el bizcocho al morderlo así que no los cortéis demasiado.
Añadimos poco a poco la harina tamizada y el cacao en polvo, mezclando ya con una espátula con movimientos envolventes para que no se nos baje demasiado todo el invento.
Esta mezcla la vertemos en un molde cuadrado, dándole una altura de 2 o 3 cm, no más, ya que, como sabéis,  es un bizcocho bajito. Yo le  pongo en la base del molde, papel de horno, y pinto los laterales con mantequilla para que luego me resulte facil desmoldarlo.
Metemos el molde al horno y lo dejamos cocer durante 25 minutos.
Una vez listo, sacamos del horno, dejamos que se enfríe un poquito para poderlo desmoldar y una vez desmoldado, lo ponemos a enfriar en una rejilla, retirando el papel de horno que se le habrá quedado pegado en la base.

Mientras nuestro brownie se está haciendo, nos da tiempo a preparar la crema inglesa:
Hervimos la leche con el aroma que queráis.
Una vez que haya hervido, tenemos que retirar el cazo.
Por otra parte mezclamos bien las yemas con el azúcar.
A esta mezcla, le añadimos la leche hervida, y lo llevamos otra vez al fuego.
En este punto el libro dice literalmente "calentamos a 86º hasta que nape perfectamente la espátula, bien al fuego, bien con la termomix".
Eso, traducido al cristiano (y teniendo en cuenta que muchos no tendréis termómetros en casa) es: calentar sin que llegue a hervir en ningún momento, removiendo constantemente con una espátula o una cuchara de madera para evitar que se pegue.
Es importante tener el fuego flojo, porque si llega a hervir, casi irremediablemente se nos corta.
Así que si véis que parece que va a hervir, levantáis el cazo un momentito para que baje la temperatura, y así hasta que consigáis que espese lo suficiente como para que no se deslice y caiga sin casi verse por la espétula si no que a pesar de caer, la deje un poquito impregnada. A eso se refiere el libro cuando dice "nape la espátula".
Una vez conseguido este punto, retiramos del fuego, colamos y dejamos enfriar.
En este caso, utilicé crema inglesa de dos colores, así que saqué un poquito en una taza, le añadí con un palillo un poquito de colorante rojo en pasta ( si lo tenéis líquido, un par de gotitas) y ya está.

Montaje del postre en el plato:
Con un cacillo de servir ponemos un círculo de crema inglesa en el centro del plato.
La crema inglesa que hemos teñido de rosa, la echamos en un biberón, para poder manejarla mejor.
Encima de la que ya está en el plato dibujamos una espiral, empezando por el centro, con cuidadito, pero sin ser tan lentos que se nos corte. Si no lo habéis hecho nunca, podéis practicar la espiral antes en un papel, y así cuando lo hagáis en el plato ya iréis con más seguridad. Pero en serio, no es dificil.
Ya tenemos el centro del plato con la cremita amarillita y la espiral rosa. Ahora cogemos un palillo y le vamos sacando piquitos a la espiral rosa desde el centro hacia fuera. Osea, metemos la punta del palillo tocando lo rosa y arrastramos un poquito el palillo desde el centro del círculo hacia afuera, para que lo rosa invada lo amarillo como si fuera un piquito.
Eso es lo más divertido y lo más sencillo, y adorna una barbaridad. Lo habréis visto en muchas elaboraciones, tanto dulces como saladas, pues también queda muy bien, por ejemplo hacer esa espiral con nata sobre una crema de calabacín, y sacarle los piquitos con el palillo.
Otra forma bonita de adornar sobre la cremita amarilla es poner unos lunares de otro color, y arrastrar el palillo como si quisíeramos dibujar el diámetro de ese lunar pero saliéndonos por un lado. Con eso conseguiréis figuras de corazón. Si ponéis varioss lunares en fila, separados entre si por un cm. o así, y los cruzáis del primero al último por una linea recta, os saldrá una fila de corazones.
Una vez tengáis hecha la decoración con la crema inglesa, solo queda cortar un par de trozos del brownie (lo normal es trozos cuadrados o rectangulares) y colocarlos sobre esta crema, procurando que uno quede un poquito montado sobre el otro. Esto le dará un poco de "verticalidad" a la presentación, lo que consigue un efecto más bonito y apetecible.
Se suele servir con un poco de helado de vainilla o un pegotón de nata montada, pero no he querido añadir más calorías al conjunto, jejeje
¡¡¡¡ Espero que lo disfrutéis !!!!

martes, 15 de febrero de 2011

NIDOS DE PASTA CON VERDURITAS

Esta es una de esas típicas recetas que se te van ocurriendo según tiras de lo que hay por la nevera.
A veces ocurre que el resultado de semejantes experimentos deja mucho que desear, y no hay quien lo coma.
Pero en cambio, otras veces, resulta que descubres un plato que te encanta, y ya se queda anotado como una de las recetas a repetir.
Esto es lo que me pasó con este plato.
Mi idea original era hacer un plato de pasta con una salsa de verduras con tomate (calabacín, berenjena...), pero al final, me faltaban algunos ingredientes, así que tiré de lo que tenía, pasé de echarle tomate para no cambiar tanto el sabor, y el resultado fué realmente delicioso.

INGREDIENTES:
*Nidos de pasta
*1 cebolla mediana
*1 pimiento rojo
*1 pimiento verde
*1 zanahoria
*1 calabarín grande o dos si son más pequeños
*100 gr. de champiñones cortados en láminas
*5 cucharadas soperas de nata de cocinar
*Aceite de oliva y sal

PREPARACIÓN:
Corto la zanahoria en rodajitas y la pongo a pochar en una sartén con un chorreón de aceite.
Corto también a cuadraditos no demasiado grandes el pimiento verde y el rojo y los añado a la sartén.
Lavo bien los champiñones y los corto en láminas.
Corto la cebolla en cuadraditos pequeños, y el calabacín en taquitos.
Cuando ya lleven unos minutitos pochándose, añado la cebolla, y al ratito el calabacín y los champiñones.
Los champiñones hay que añadirlos poco a poco, porque si los echamos de golpe, sueltan mucha agua y entonces se cocerán, en lugar de pocharse.
He seguido ese orden porque la zanahoria y los pimientos tardan más en pocharse y no quería que el resto de las cosas se me hicieran demasiado y se pusieran muy blandas.
Sazono y cuando vea que las verduras están listas sin pasarse, retiro.
Por otro lado pongo a hervir unos nidos de pasta en una cacerola con abundante agua con sal y un chorreón de aceite. El tiempo de cocción será el indicado en el envase de pasta, ya sea fresca o seca.
Yo últimamente hago la pasta, porque en navidad me regalaron la maquinita de hacer pasta, y tengo un vicio tremendo.
Ya os la enseñaré en otra ocasión y pondré la receta de pasta fresca que nos dieron en clases.
Seguimos con las verduras: Cojo un vaso de batidora, y le echo 4 o 5 cucharadas de nata para cocinar.
De la cantidad de verduras que hemos pochado, cojo una parte (yo lo que hice fué sacar dos o tres cucharones, más o menos un tercio del total) y lo añado a ese vaso de la batidora que tiene la nata.
Le añado una cucharadita de albahaca.
Lo bato bien, rectifico de sal si hiciera falta,  y me quedará una salsita de lo más rica para acompañar a la pasta.
Una vez escurrida la pasta le añado la mitad de las verduras que me quedan y remuevo bien para que se mezclen todos los jugos.

Ya solo queda emplatar.

Saco la ración de pasta, le echo por encima verduritas y con una cuchara sopera le añado varias cucharadas de la salsa que trituramos.
No se trata de bañar la pasta con esa salsa, si no de que quede jugosa y con sabor.
Y listo: Un buen plato de salsa muy rico y muy sano.
Espero que os guste y os aproveche!!!

viernes, 11 de febrero de 2011

BOCADITOS DE NUBES

Esta es una receta que vi hace ya tiempo, en uno de mis blogs favoritos, y que la mayoría de vosotros conoceréis.Se trata del blog L'exquisit, de Sonia. Ella a su vez, lo pilló del blog Las recetas de Sara que también tiene unas cosas maravillosas, así que os recomiendo tanto uno como el otro, porque os gustarán.

Son una delicia.

Ni le he cambiado el nombre, ¿para que? Realmente son suaves, dulces, blanditos...como una nube, así que el nombre les viene fenomenal.

Lo mismo van bien para desayunar o una buena merienda, que te puedes pillar un par de ellos para comerte a media mañana en el trabajo.

La receta no es nada complicada,  y el resultado, estupendo.

INGREDIENTES: (saldrán unos 15 o 16 bollitos):
*200 grs. harina floja (osea, la normal)
*30 grs. fécula de patata
*60 grs. azúcar
*Una pizquitca de sal
*6 grs. levadura instantánea de panadero (ó 12 grs. 
  levadura fresca )
 *40 grs. mantequilla (debe estar a temperatura 
   ambiente)
 *La ralladura de un limón ( yo a veces los he hecho
   así, y otras veces le he echado unas gotitas de 
   esencia de vainilla y salen también muy buenos).
*125 grs. leche templadita
*Azúcar glas para decorar
*Canela  (opcional)

ELABORACIÓN:

En un bol mezclamos todos los ingredientes secos (osea, la harina previamente tamizada, la levadura, la fécula, el azúcar y la sal)

Añadimos la mantequilla a temperatura ambiente, el aroma que hayamos elegido y la leche templada.

La leche la iremos añadiendo poco a poco, según nos vaya admitiendo la masa (de hecho, si véis que se os va a quedar un poco líquida, le podéis echar algo menos de leche).
Amasamos todo esto bien, pero no demasiado, simplemente hasta que nos quede una masa homogénea, y lo dejamos levar, tapado con un paño.
La mejor manera de que una masa leve bien, es tenerla en un sitio protegido de corrientes de aire y templadito, así que yo pongo un horno pequeñito que tengo a temperatura baja, y coloco el bol con la masa, sobre una rejilla justo encima del horno.  Ese calorcillo que le llega, añadido al pañito que tapa el bol, hace que la masa suba fenomenal.

Despues de hora y media o dos horas, ponemos la masa sobre una superficie enharinada (la encimera, por ejemplo) y amasamos un poquito.

Formamos bolitas de unos 30-35 gr. aprox.,y  las colocamos bien separadas sobre un papel de cocina que habremos puesto en la rejilla del horno

Tapamos de nuevo con el paño, para que vuelvan a levar, durante más o menos una hora.

Cuando falten unos 15 minutos, ponemos el horno a 180º para que se vaya calentando.

Con el horno ya caliente, las destapamos, metemos la rejilla no en el centro, si no justo un nivel más abajo y las dejamos hornear entre 12 y 15 minutos ( ya dependerá del tamaño que le hayáis dado a las bolitas).

Cuando veáis que están un poco doraditas, ya las podéis sacar.

Todavía calientes, le echáis el azúcar glas por encima. También está muy buena la mezcla de azúcar glas y canela.

Lo ideal es enfriarlas en la rejilla, fuera del horno, qunque si no aguantáis hasta que se enfríen, podéis comeros algunos cuando estén templaditos, ya veréis que cosa más rica.

martes, 8 de febrero de 2011

HE QUEDADO FINALISTA EN EL "CONCURSO DE COCINA CERVECERA GAMBRINUS 2011"!!!!!

LA RECETA EN CUESTIÓN ES
"MILHOJA DE CALABAZA, MI-CUIT Y PERA,
CORONADA POR CARAMELO DE CERVEZA"
Hace ya unos días que quería poner esta entrada en el blog, pero he conseguido aguantarme hasta hoy (y me ha costado un montón, no creáis).
Os cuento, tal como el título dice, una receta mía ha quedado finalista en el VII CONCURSO CERVECERO GAMBRINUS DE COCINA.
Se trata de un concurso que organiza la Escuela de Hostelería Gambrinus, de Sevilla, en el que invitan a participar a numerosas escuelas de hostelería.
El requisito es que las recetas tienen que ser de creación propia, y llevar, entre sus ingredientes, cerveza.
Cada escuela invitada podía mandar un máximo de 4 recetas, y tras un proceso de selección en la escuela anfitriona, a la final, (que se ha celebrado hoy en Sevilla), solo llegaban un total de 6 finalistas.
Para mi ha sido una enorme y agradable sorpresa, la verdad, porque cuando Mili, mi profesora de cocina nos planteó en clase que quien quisiera, presentara algo, no se me pasó nunca por la cabeza llegar hasta aquí.
Eso fué a mediados de enero, y ese fin de semana me lo pasé metida en la cocina, probando varias cosas a ver si conseguía sacar algo decente, poniendo a prueba en más de una ocasión la paciencia de Jose, jejeje!!!
El lunes le presenté a Mili varias opciones, y estuvimos descartando algunas, hasta que finalmente decidimos intantarlo con la milhoja.
De mi clase se presentaron otros dos compañeros, y de la escuela, en general, también presentaron unas cuantas recetas. Todas fueron elaboradas allí para que los profesores seleccionaran las que más les gustaban.
Eso ya suponía un reto para mi, ya que solo podían seleccionar cuatro.
Así que cuando Noelia (la profesora encargada del concurso) y Mili me confirmaron que la mía era una de las que pasaba, fué una gran alegría, y suficiente triunfo como para aspirar a más.
En total seleccionaron 3 recetas, enviando junto con la mía, la de mis otros dos compañeros de clase que presentaron, así que un pleno para la clase de 1º de Restauración. Mili, ya puedes estar contenta con tus chicos, eh???
Pues nada, cuando creía que ahí quedaría la cosa, porque la verdad, de tantas escuelas y tantas recetas, nunca me planteé que fueran a escoger la mía, me llama Noelia por teléfono para decirme que la Escuela de Hostelería Gambrinus había seleccionado la mía como una de las 6 recetas finalistas!!!!
¿Os lo podéis creer????
Para mi ha sido algo muy importante, porque no es lo mismo cocinar algo en mi casa, para los amigos, que hasta cierto punto son profanos en la materia, y que siempre van a mirar lo que les hagas con cariño,  que el reconocimiento de una escuela de hostelería como finalista en un concurso.
La verdad, que no es lo mismo, jejeje. Sobre todo si te quieres dedicar a esto profesionalmente.
Además, no se trata de participar en un concurso a título individual, si no de ir representando a mi escuela, y ya eso, es un orgullo personal por si solo, además de una responsabilidad, ¿no créis?
Hasta aquí, la buena noticia. La mala es que finalmente, por motivo de fuerza mayor, lamentablemente me ha sido imposible ir, y cuando pensaba que iban a descalificar la receta y escoger a algún reserva, la escuela organizadora del concurso sugirió que fuera alguien a elaborarla en mi lugar, así que allá que ha ido uno de los compañeros de mi clase, acompañado por mi profesora Mili.
Acabo de hablar con ella hace un ratito, al final no ha ganado ningun premio, pero ya el hecho de haber estado allí creo que habrá tenido que ser una experiencia muy interesante.
No ha tenido más que 3 o 4 días para practicar, así que bastante valor le ha echado el hombre con ir, pero tenía muchas ganas, así que lo habrá pasado fenomenal a pesar de los nervios. Es uno de los compañeros de la clase que también presentó receta, así que por lo menos me alegro que él haya vivido la experiencia, ya que yo no he podido asistir.
Yo me quedo con la satisfacción de haber sido escogida, que ya es bastante!!!
Os pongo la receta tal cual la envié al concurso. Había que mandar para 5 raciones: 4 para los miembros del jurado y 1 para la fotografía y presentación.
Al final podré algunas matizaciones.

INGREDIENTES: (para 5 milhojas, una por persona):

500 ml. de Cerveza Cruzcampo
400 ml. de Cerveza Cruzcampo Gran Reserva
5 rodajas de foie mi-cuit (aprox. 500 gr.)
3 peras
3 patatas
750 gr. de azúcar moreno
200 gr. de cebolla
3 dientes de ajo
375 gr. de setas
500 gr. de calabaza
50 gr. de piñones
Aceite de oliva
1 guindilla pequeña
Sal

ELABORACIÓN:
Hacer al horno la patata cortada en rodajas finas (de unos 2 mm.) con un poquito de aceite y sal.
Pasados 10 minutos poner la pera en el horno, cortada en rodajas también finas.
Cuando estén ambas cosas blanditas las saco.

Para elaborar la farsa de setas, calabaza y piñones:
Cortar el ajo, la cebolla, las setas y la calabaza en brunoise.
Pochar el ajo y la cebolla en el aceite de oliva con la guindilla , añadir las setas y cuando estén medio hechas, la calabaza.
Pasados cinco minutos, añadir los piñones.
Cuando esté a medio hacer, vierto un  y dejo que se vaya cociendo todo unos 10 minutos a fuego medio, para que se reduzca la cerveza.
Rectifico de sal.
Aparto y reservo.
Una parte de esta farsa, irá triturada, y pasada por el chino, para adornar el plato.

Para hacer el caramelo de cerveza:
Meto un puñado de pasas sultanas en un bol con la Cerveza Cruzcampo Gran Reserva
Pongo a reducir la cerveza con el azúcar (250 gr.) y las pasas.
Tiempo: Entre 12 y 15 minutos.

Para elaborar el caramelo crujiente de cerveza:

Pongo a derretir el resto del azúcar moreno en una sartén, removiendo constantemente.
Una vez líquido, añadir un chorreón de Cerveza Gran Reserva, y seguir removiendo hasta que  reduzca.
Una vez tenga la textura deseada, hacemos la filigrana sobre papel vegetal, para que luego se nos despegue con facilidad. Para ello he utilizado una espátula y se trata de hacer dibujos con rapidez y sin pensar demasiado, manteniendo la espátula en alto para que el chorrito de caramelo no resulte demasiado grueso.

Montaje del plato:

Con un aro de emplatar pequeño, colocamos primero una capa de patata, después la rodaja de mi-cuit, recortada con el propio aro de emplatar,  capa de láminas de pera, capa de la farsa de calabaza, setas y piñones.

De nuevo otra capa de patata, un poco de mi-cuit (los recortes que han sobrado), y la terminamos con las láminas de pera.

Coronar con el caramelo de cerveza sobre la milhoja, procurando que las pasitas queden amontonadas. La textura de este caramelo tiene que ser melosa, similar a la de un toffe.

Hacer ahora  una pincelada en el plato con la cremita de calabaza y setas.
Poner sobre ella, algunos piñones para adornar.

Colocar la filigrana de caramelo de cerveza crujiente apoyada en la milhoja y en el plato.
Hasta aquí la receta tal cual la mandé al concurso.

Como observaciones importantes deciros:                                                          
                               -Obviamente, el concurso lo organizaba el grupo Heineken, y había que utilizar cervezas
                                 de sus marcas, pero está claro que podéis utilizar la que queráis.
                               -Una farsa no es más que un relleno. Con un chorreón de cerveza es suficiente, y si véis
                                 que queda demasiado fuerte, añadir un poquito de agua para suavizar.
                               -Para hacer la salsita, una vez apartemos la parte que se va a utilizar para el relleno,    
                                 añadiremos algo más de agua para que nos quede caldosito y poderlo así triturar con
                                 más facilidad. Es importante que la calabaza sea muy naranja y no coger demasiadas 
                                 setas para que no maten el color.
                                 Para hacer la pincelada en el plato, el truco consiste en echar un poquito con una
                                 cuchara grande y luego, con el envés de esa misma cuchara, extendelo con un solo
                                 movimiento, sin dudas y con decisión. Si lo hacemos despacito, nos saldrá mal.
                               -Con respecto a la corona de caramelo, está claro que esto es sobre todo un adorno a
                                 la hora de presentar el plato y que quede más lucido, así que podéis prescindir de él.
                                 Es algo complicado, aunque no mucho, sobre todo es cuestión de práctica, con que os
                                 pongáis a hacerlo varias veces sobre un papel, os saldrá sin problemas, y el sabor es
                                 muy rico.

Pues nada, espero que os haya gustado.

Creo que supone un contraste de sabores muy curioso, combinando el intenso sabor del mi-cuit, con el dulzor de la pera y del toffe de cerveza con las pasas. Os recomiendo que la probéis, aunque sea haciendo simplemente una como entrante para poner al centro.

Estaba deseando compartir esto con vosotros, y desde aquí también quiero darle las gracias a Mili, y a Noelia, por su ayuda y sabios consejos cuando estaba preparando la receta en mi escuela, y en general a mi escuela por considerarla merecedora de ir al concurso, y por supuesto a mi compañero de clase  Jose por asistir en mi lugar a la final.

viernes, 4 de febrero de 2011

ABADEJO RELLENO DE VERDURAS CON PASTEL DE PATATA AL GRATÉN Y DOS PREMIOS


Durante unos días, me va a ser imposible cocinar, pero como tengo una considerable cantidad de recetas en cola desde Navidades para acá, voy a aprovechar para ir poniéndolas.

En esta ocasión, os quiero mostrar este pescado relleno que estaba para chuparse los dedos.
Su compañero, un pastel de patata al gratén, una receta que nos enseñó Mili, mi profesora de cocina y pastelería en la Escuela de Hostelería donde estoy estudiando.

Por cierto, si vivís por la provincia de Cádíz y queréis la opinión de una profesional de la hostelería sobre algunos restaurantes, meteros en su blog. No es un blog de recetas si no más bien, de crítica gastronómica, que os puede venir muy bien a la hora de saber si merece la pena comer en tal o cual sitio. Yo ya he estado en de par de sitios recomendados por ella, y estoy totalmente de acuerdo con su criterio.

Con esta receta quiero participar en el CONCURSO DE RECETAS DE INVIERNO de Anita Cocinitas, un blog que he descubierto hace poco y que me encanta,  y MUMUMÍO.
Mumumío es una estupenda tienda on-line de productos de calidad que he descubierto gracias a Anita y que ya tengo guardada en "mis favoritos" porque tiene unas cosas para hacerse la boca agua...

INGREDIENTES:
Unos lomos de abadejo
Un calabacín
Un buen puñado de champiñones
Pimientos del piquillo (o en su defecto, unos pimientos morrones)
4 o 5 patatas grandes
Un poco de nata líquita de cocinar(como ya he dicho, se trata de una receta ligera, así que vamos a usar poca cantidad).
Pimienta negra
Albahaca
Sal
Aceite de oliva

ELABORACIÓN: 

Por un lado vamos a preparar el pastel.

Y con esta excusa os presento mi nueva mandolina, uno de los regalos de reyes de mi amado y comprensivo esposo.
En sucesivas entradas os iré enseñando el resto de regalos, porque tengo la cocina tan a tope de cosas, que no se si tirar tabique y cogerle un trozo al vecino, o abrir un hueco sobre el patio de luces para hacer un armario empotrado. Pero más feliz que una perdiz, eso si!!!!

Estoy muy contenta, porque en clases la hemos estado utilizando, y desde entonces sentía que me hacía muuuucha falta.
La verdad es que si no tenéis, no es imprescindible. Basta con cortar las patatas muy pero que muy finitas, casi transparentes. Para ello va fenomenal el pelador de patatas.

Una vez que hemos cortado las patatas en rodajas muy finas, cogemos una fuente de horno, y echamos un poquito de aceite en la base.
La cubrimos con una capa de patatas.
Les ponemos sal y alguna especia que os guste. En este caso yo le he puesto un poquito de pimienta negra y albahaca.

IMPORTANTE: Es conveniente poner pocas especias, porque se irán repitiendo una capa si y otra no, y si nos pasamos luego va a estar incomible. Lo digo por experiencia, que en la escuela lo hicimos y algunos quedaron para tirarlos.
Ponemos una segunda capa de patatas y encima de las mismas, una fina capita de nata.
La siguiente capa de patatas y las especias y sal.
Siguiente capa de patatas y de nuevo nata.
Seguimos así poniendo varias capas hasta tener una altura de unos 3 o 4 centímetros.
Terminamos con la capa de nata, echamos por encima un poco de pan rallado y algo de queso rallado y lo metemos al horno, a unos 180º. Si vemos que se nos gratina demasiado lo cubrimos con papel de aluminio. No os digo tiempo porque dependerá del tamaño y la altura que le deis y del grosor de la patata. Antes de
sacarlo, pinchar con un palillo para comprobar que la patata está tierna.

Mientras el pastel se nos va haciendo en el horno, vamos con el relleno:

En una sartén a fuego medio, pochamos la cebolla cortadita muy menuda, luego le añadimos el calabacín y por último los champiñones laminados. Estos últimos poco a poco para que no suelten demasiada agua y en lugar de pocharse se cuezan.
Una vez hecho todo le añado un poquitín de leche para formar una masita unida y jugosa. Muy poca cantidad, que no nos quede muy líquido.
Rectificamos de sal y apartamos.
Con esto que hemos hecho nos va a dar para el relleno y para la salsa.

Y ahora le toca el turno al pescado:

Cortamos los lomos de abadejo en trozos similares, para poder poner dos capas y el relleno en medio.
Yo he utilizado este pescado, pero está claro que se puede hacer con muchos tipos, desde merluza, hasta salmón...
En una fuente de horno untamos un poquito de aceite, y ponemos la mitad de los trozos de pescado.
Le ponemos un par de cucharadas de relleno a cada trozo, lo cubrimos con los trozos de pescado sobrantes y echamos un poquito de aceite por encima y sal.
Los metemos al horno a 180º para que se haga el pescado. Tampoco pongo tiempo en esta ocasión porque dependerá del tamaño de los trozos, pero vamos, el pescado no necesita mucho tiempo.


Mientras, prepararemos la salsa:

Al relleno que nos ha sobrado le añadiremos unos cuantos pimientos del piquillo o en su defecto morrones, muy troceados. Pasados dos o tres minutos, añadimos un poquito de nata y un buen chorreón de leche, lo echamos todo en el vaso de la batidora y lo trituramos todo bien, para que quede una salsita fina.
Esta salsa la colamos, la volvemos a echar en la sartén y a calentar.

Montaje del plato:

Con un cacillo, echamos un poquito de salsa de piquillos en el plato.
Encima colocamos dos trozos de pescado relleno.
Con un cortapastas cortamos un pedazo de pastel de patata y lo añadimos al plato (No es dificil y el resultado es mucho más vistoso que cortando un trozo con un cuchillo).
Salseamos un poquito y listo.
Quiero aprocechar esta entrada para agradecer a 3 compañeras blogueras fantásticas, el que me hayan concedido estos dos premios:

      Este primero se lo tengo que agradecer a Pilar, del blog COCINAR PARA LOS MÍOS , un blog con todo el sabor de las recetas de las madres, que para mi, son las mejores. Ha sido el primer blog que hizo una de mis recetas, y eso me puso muy feliz.

También a Mar, del blog  MIS RECETAS DULCES Y SALADAS, una chica estupenda con la que he sentido una conexión especial desde que descubrí su blog.

                 Este segundo premio me lo ha concedido Dulce, del blog LA PASTELERIA EN CASA, una chica de Orense, paisana por lo tanto, que por mucho que diga que no es profesional, eso no hay quien se lo crea, pues sus recetas parecen sacadas de la mejor pastelería.

Muchas gracias a las tres, es estupendo que se acuerden de una para estas cosas tan bonitas y me ha hecho muchísima ilusión.

En ambos premios, una de las condiciones es nominar a otros blogs, pero como es mi costumbre desde que empecé, me siento incapaz de hacerlo, escoger a unos y descartar a otros. Así que os los brindo a todos los que seguís mi blog, para que lo coja el que quiera.
En este segundo premio hay que contar 7 cosas sobre mí, así que ahí van:
1. Mi gran afición-obsesión, que me apasiona y me pilla todo mi tiempo, y más si tuviera es, como muchos de vosotros, cocinar.
2. Como no todo van a ser los fogones, otras cosas que me gustan mucho son leer, la fotografía, y estar con mi perro Pipo y mi gata Lola. Los quiero a los dos, pero Pipo es mi debilidad!!!
3. Me encantan las series de televisión,  como por ejemplo  "Mujeres desesperadas" a las que llamo "mis chicas" y que me pongo siempre cuando tengo que planchar. La tarea se hace mucho más amena!!!
4. También me gusta el cine, sobre todo las pelis románticas, que le vamos a hacer. Si son comedias mejor, tipo "Bajo el sol de la Toscana" y si son de cocina, también mucho mejor. tipo "Sin Reservas" o "Julie&Julia"
5. El centro de mi vida, es Jose, mi marido.
6. No tengo hijos todavía, pero si un sobrino, Emilio, y una sobrina, Uxue, a los que adoro. Os juro que no es amor de tía cuando os digo que son dos de los niños más guapos del mundo!!!
7. Sueño con el día que termine mis estudios y pueda trabajar de cocinera.

Ea, pues ya está.